He aprendido que no es verdad eso que la felicidad depende de nosotros mismos,queramos o no los seres humanos siempre vamos a depender de alguien y nuestra felicidad en parte también depende de la gente que nos rodea,pero la otra parte dependerá de nosotros de el valor que le echemos a la vida.Pero sobre todo me he dado cuenta de que siempre hay que sonreir,siempre porque siempre nos quedamos con lo malo,con lo que fue o con lo que no fue,en lo que no tenemos..nunca pensamos en lo bueno que nos queda o en lo bueno que hemos vivido y siempre quedará algo que te hará seguir adelante,por pequeño que sea.